La música ayuda a mejorar nuestra salud

El entrenamiento musical produce efectos beneficiosos sobre diversas funciones mentales.

Durante los últimos años, los medios de comunicación contribuyeron sustancialmente a divulgar el impacto positivo que posee la música sobre la salud. Esto se debe a que la ciencia ha venido corroborando que el entrenamiento musical fomenta el desarrollo de diversas funciones cerebrales.

La música es un poderoso regulador emocional a nivel individual y colectivo. ¿Quién no ha experimentado melancolía escuchando el tema Yesterday de los Beatles?, o basta ver la ola de euforia y placer generada en un concierto de rock.

La música puede disminuir la ansiedad y prevenir el stress, ¿acaso no es común armar una playlist especial para bajar un poco a tierra y relajarse o practicar yoga?

Pero más sugestivo aun es el hecho de que el entrenamiento musical, es decir, aprender a cantar o a ejecutar un instrumento, produce efectos beneficiosos sobre el desarrollo del lenguaje, la atención, la percepción visuoespacial y las funciones ejecutivas mentales.

Basándose en las evidencias científicas y con el objetivo de promover mejoras en la salud de la población, instituciones de varios países están impulsando el diseño y estandarización de intervenciones terapéuticas basadas en la música para el alivio y la cura de diversas enfermedades (por ejemplo, Parkinson, Alzheimer, autismo y cáncer). El Instituto Nacional de la Salud (NIH) y el Centro JFK para las Artes Escénicas (KC) de los EE.UU. organizaron recientemente un taller, con el objetivo de analizar el estado actual del conocimiento y de las investigaciones que exploran las relaciones entre la música, el cerebro y la salud.

El evento tuvo lugar en el KC en Washington D.C. y forma parte de una iniciativa, que se dio en llamar “Sonido y Salud” (https://www.nih.gov/sound-health/music-mind), de las dos instituciones mencionadas en asociación con el Fondo Nacional de las Artes (NEA-USA). Allí, reconocidos especialistas y referentes institucionales presentaron y discutieron los avances recientes y formularon una serie de recomendaciones para acelerar los estudios sobre los efectos de la música en el cerebro y sus implicancias para la salud humana e implementar las correspondientes aplicaciones de estos conocimientos con fines terapéuticos.

El programa constó de tres secciones principales que abarcaron los distintos estadios de la vida: niñez, adultez y vejez. Los conceptos centrales fueron analizar el impacto de la experiencia musical en el desarrollo individual, la promoción de la salud y el bienestar humano y evaluar diferentes tipos de intervenciones terapéuticas basadas en la música para adaptarlas a las habilidades y necesidades individuales (para una descripción pormenorizada de los contenidos se puede consultar http://www.cell.com/neuron/fulltext/S0896-6273(18)30103-X).

Este tipo de iniciativas auspician una muy interesante y oportuna resignificación del rol de las actividades musicales en el desarrollo humano y social, particularmente en relación a la influencia que puede tener sobre la salud. De acuerdo a la repercusión institucional que ha tenido esta reunión, es razonable pensar que enfoques terapéuticos de este tipo alcancen en poco tiempo un mayor grado de sistematización y acaben difundiéndose a la práctica clínica de manera más masiva.

Daniel J. Calvo es biólogo. Laboratorio de Neurobiología Celular y Molecular, INGEBI-CONICET-UBA

Fuente: https://www.clarin.com/opinion/musica-ayuda-mejorar-salud_0_SkI6vxlnG.html

Comentarios en facebook

Ir arriba