En enero de este año, Nice López, estudiante de saxofón del Instituto Profesional Projazz, tuvo la oportunidad de representar a Chile y a su marca en un prestigioso encuentro internacional realizado en la Patagonia argentina. Con solo unos pocos meses de colaboración con la marca, su participación en este evento marcó un hito importante en su carrera, destacándose no solo por su presentación sobre la marca, sino también por una master class sobre los ritmos latinoamericanos que surgen en Chile. La audiencia recibió con entusiasmo su enfoque innovador.
Durante el evento, López estableció valiosos contactos con profesionales de varios países, entre los cuales un profesor brasileño quedó particularmente impresionado por su charla sobre la música chilena. Este encuentro le llevó a una invitación inesperada para participar en el Festival Internacional de Saxofonistas en Brasilia, uno de los más prestigiosos en su tipo, El Encuentro internacional de Saxofonistas de Brasilia 2024 que se celebró en el mes de julio.
Este festival, que celebra su cuarta edición este año, ha ganado reconocimiento mundial, atrayendo a saxofonistas de diversas partes del mundo. La edición de este año fue la más internacional hasta la fecha, con la participación de músicos de América Latina y otros continentes.
Al llegar a Brasilia, López encontró caras familiares, ya que varios músicos presentes habían asistido también al encuentro en Argentina. Las primeras jornadas en Brasil estuvieron llenas de actividades, incluyendo workshops y master classes desde las 8:30 a.m. hasta las 9:00 p.m. Cada día finalizaba con conciertos en dos escenarios: uno dedicado a música clásica y otro a géneros populares como el jazz y el chorinho.
La participación de López no se limitó a conciertos; también aprovechó para asistir a clases de danza, explorando la relación entre la música y la corporalidad. «Siempre me ha fascinado cómo el cuerpo interactúa con la música. Este festival me permitió conectar esas dos pasiones», comenta López.
Uno de los momentos más destacados para la música chilena fue un pasacalle en las calles de Brasilia, donde, junto a otros saxofonistas de todo el mundo, interpretaron piezas clásicas y ritmos locales como la zamba y el choro. «Lo más increíble fue cuando me uní a una improvisación en una roda de choro. Al principio no entendía la estructura, pero decidí lanzarme y participar. Esa es la mejor manera de aprender», recuerda con emoción.
Nice López continúa destacando la importancia de seguir construyendo redes con músicos de todo el mundo y continuar compartiendo la rica tradición musical de Chile.
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